Discurso inaugural del I Congreso Nacional de Psicología

Abstract

Es un verdadero honor para mí, así como para la Junta de Gobierno del Colegio Oficial de Psicólogos, iniciar en el día de hoy las sesiones de este Primer Congreso. Es un honor, por cuanto hoy se inicia una nueva etapa de la profesión y porque atrás quedan inevitablemente aquellos años en que teníamos que ocupar espacios ajenos para reflexionar sobre ella y sobre la Psicología.

Y digo que se inicia una nueva etapa porque la reflexión que va a llevar a cabo este encuentro de cerca de mil quinientos psicólogos, debatiendo sobre los campos de actuación, los modelos de intervención, los problemas metodológicos, y todos aquellos aspectos que los profesionales están viviendo cada día; supone un gran esfuerzo por alcanzar los objetivos que nos propusimos y que, de alguna forma se han desbordado por la participación masiva y entusiasmada y por la existencia de una realidad profesional más viva de lo que pensábamos.

Esos objetivos se centran en los siguientes:

- Llevar a cabo un primer encuentro entre los profesionales de todo el Estado español.

- Analizar la problemática profesional de Psicólogo y abrir perspectivas de futuro en base a la realidad social de su práctica.

- Conocer los distintos modelos de intervención y metodologías empleadas en las distintas áreas y servicios.

- Reflexionar sobre las distintas propuestas para el desarrollo normativo, deontodológico, formación e investigación del psicólogo.

Todo ello se va a realizar a través de:

- Cinco ponencias, en las áreas de Salud, Educativa, Trabajo, Sociedad y Profesional.

- Seis paneles multiprofesionales.

- Ocho invitados extranjeros, representantes de colectivos profesionales internacionales de reconocido prestigio, en áreas donde interviene la Psicología.

- Cinco Comités Técnicos que aglutinan un total de treinta personas.

- Cincuenta Mesas Redondas con sesenta y ocho coordinadores.

- Trescientas cincuenta y una comunicaciones.

- Mil trescientos congresistas.